Te quiero compartir un resumen de una persona que admiro mucho, el Dr. Andrew Huberman, Ph.D., neurocientífico y profesor titular en el departamento de neurobiología y, por cortesía, de psiquiatría y ciencias del comportamiento en la Facultad de Medicina de Stanford.
En un reciente episodio de su podcast, compartió valiosas ideas sobre cómo funciona nuestro cerebro en términos de concentración, motivación y perseverancia. Su discusión ilumina los procesos neuroquímicos que ocurren cuando nos enfrentamos a tareas desafiantes y cómo, al comprender estos procesos, podemos aumentar nuestra productividad y nuestro éxito.
El eje central de la explicación del Dr. Huberman está basada en la idea de que las primeras etapas del trabajo duro y la concentración suelen ir acompañadas de sentimientos de estrés, agitación y confusión. Esto se debe a que el cerebro libera norepinefrina (también conocida como noradrenalina), una sustancia química que nos ayuda a despertarnos y mantenernos alerta. Es esencial reconocer que estos sentimientos son una parte natural del proceso. Al igual que un atleta no esperaría rendir al máximo sin calentar, el cerebro también necesita tiempo para ajustarse y concentrarse en la tarea.
El Papel de la Dopamina
Uno de los puntos clave que destaca el Dr. Huberman es el rol de la dopamina. Muchas personas asocian la dopamina con la sensación de logro que llega al alcanzar un hito importante, como publicar un libro o recibir un ascenso. Aunque esto es cierto, el Dr. Huberman subraya que la dopamina también juega un papel crucial para mantenernos en el camino durante el proceso. Cada pequeño logro, por insignificante que parezca, desencadena la liberación de dopamina. Esta neuroquímica ayuda a contrarrestar la fatiga y el estrés causados por la norepinefrina, lo que nos permite continuar hacia nuestras metas.
La dopamina, en esencia, le dice a nuestro cerebro: "Estás en el camino correcto, sigue adelante". Esta sustancia no solo está asociada con las grandes recompensas; se libera cada vez que logramos una pequeña victoria, lo que nos motiva a mantener el enfoque. Por ejemplo, al escribir un libro, puede que no todos los días produzcas tu mejor trabajo, pero en los días en que avances, digamos que escribes una parte con 800 palabras, la dopamina entra en acción y te ayuda a mantener la motivación.
La Importancia de la Auto-recompensa
El Dr. Huberman señala que muchas personas dependen demasiado de las recompensas externas, como elogios o incentivos financieros, para mantenerse motivadas. Sin embargo, él sugiere que las recompensas internas son mucho más sostenibles a largo plazo. Al aprender a reconocer y celebrar internamente los pequeños logros, podemos mantener la motivación y la concentración durante períodos prolongados. Aquí es donde el concepto de "auto-recompensa" cobra gran poder. En lugar de esperar que alguien más valide tu progreso, el simple hecho de reconocer tus propios esfuerzos puede desencadenar la liberación de dopamina necesaria para seguir avanzando.
La idea de establecer metas más pequeñas y alcanzables dentro de un objetivo más grande también ayuda a amortiguar la respuesta del cerebro ante la fatiga. Cada vez que completamos una tarea menor, suprimimos la inclinación del cerebro a rendirse, provocada por la acumulación de norepinefrina. Esto nos permite trabajar durante más tiempo, con mayor concentración y energía.
Mentalidad de Crecimiento y Concentración
El Dr. Huberman también habla sobre la importancia de adoptar una mentalidad de crecimiento. Las personas con esta mentalidad entienden que los desafíos y las dificultades son parte del proceso, y aprenden a encontrar satisfacción en el esfuerzo en sí mismo. Ven los obstáculos no como bloqueos, sino como oportunidades para aprender, crecer y mejorar. Este cambio mental ayuda a reconfigurar los circuitos del cerebro que se encargan de la concentración, haciendo más fácil involucrarse y disfrutar delas tareas que requieren esfuerzo sostenido.
Conclusión
Las ideas del Dr. Huberman ofrecen una nueva perspectiva sobre cómo podemos aprovechar la neuroquímica del cerebro para mejorar la concentración, la motivación y la perseverancia. Al comprender y aceptar las etapas naturales de estrés y confusión al inicio de una tarea, y al aprender a auto-recompensarnos a lo largo del proceso, podemos desbloquear niveles más altos de productividad y éxito en cualquier área de la vida.
(referencias)